Los primeros pasos de la cicatrización son ayudarlos manteniendo los tejidos en reposo. No moleste el sitio de la intervención. Evite la masticación excesiva, escupir o hacer enjuagatorios rigurosos.

Guarde reposo durante las primeras 24 o 48 horas consecutivas a su operacion. Al acostarse mantenga su cabeza elevada mediante una almohada.

Eventualmente puede ocurrir un ligero sangrado, no se alarme, este se controla ejerciendo presión firme mediante una gasa en el sitio quirúrgico durante 45 minutos. En caso que el sangrado persista, consulte de inmediato.

Tome los medicamentos en la forma y como le fueron indicados. Si alguno de ellos crea una reacción desagradable (urticaria, dolor estomacal, etc...), consulte de inmediato.

Es normal que se presente inflamación alrededor del sitio quirúrgico. Con el fin de minimizar esto, es aconsejable colocar compresas heladas duranto 20 minutos cada hora sobre el sitio de la operación por 2 días.

Su dieta debe ser liquida y preferiblemente fría durante el primer postoperatorio. Al día siguiente puede iniciar su dieta normal siempre que la tolere.

No fume hasta por lo menos haber trascurrido 48 horas después de la cirugía.

A los dos días siguientes de la intervención realice enjuagatorios cuidadosos de agua tibia con sal, sulfato de magnesio o caléndula 3 veces al día. Cepillese los dientes en forma cuidadosa, si su cepillo le molesta, utilice uno para niños.

Después de 48 horas debe aplicarse compresas húmedas calientes durante 10 minutos cada hora sobre el sitio de la inflamación. Es factible que se presente una equimosis (morado) después de los primeros días. Esto disminuirá con las compresas calientes.

Seguir cuidadosamente estas instrucciones, ayudará a que usted se sienta mejor y asegurarán su pronta recuperación.